Sección digital Otras reseñas Septiembre de 2008

Pilar Gonzalbo Aizpuru, Verónica Zárate Toscano (coord.), Gozos y sufrimientos en la historia de México, México, El Colegio de México-Instituto de Investigaciones Dr. José María Luis Mora, 2007, 315 p. [*]

Frédérique Langue

 

Las emociones escasamente se convierten en objetos de la historia, a no ser que estudiosos de temáticas sociales y especialmente de la vida cotidiana terminen adentrándose en ellas. Tal es el caso con esta recopilación centrada en el sufrimiento y el regocijo de los hombres del pasado. Apunta de entrada hacia la herencia cultural europea, sin la cual no se puede entender cabalmente los sincretismos que se dan en el Nuevo Mundo, o las formas genuinas de comprender el mundo que se derivan del encuentro entre un mensaje cristiano de cuño mesiánico, redentor y amenazante a la vez, y las creencias originarias del hombre mesoamericano. Asimismo destaca los dos escenarios involucrados en la expresión de los sentimientos y emociones en la vida cotidiana: la esfera de lo privado y los espacios públicos — cuya normativa moral, política y religiosa va experimentando cambios drásticos a lo largo del período considerado, desde el siglo XVI hasta los inicios del siglo XX — , lo particular y lo universal, también evolutivos, tanto en lo material como en lo espiritual (caso del dolor en la historia para mencionar tan sólo este ejemplo), o lo individual y lo colectivo que rigen la expresividad de los cuerpos y de las mentes, y más cuando semejante estudio no puede desligarse del contexto donde se va forjando esta expresividad. En ese aspecto, las coordinadoras de la obra señalan con acierto la dificultad que hay en historiar sentimientos y emociones, en desentrañar los cambios de paradigmas o matices dentro de los comportamientos. Insisten en el hecho de que, en la Nueva España y en el México independiente, « se produjeron cambios de actitud que paulatinamente comenzaban a borrar los temores al más allá a la vez que surgía un ansia de felicidad material y terrena más que espiritual y mística ».

Los trabajos reunidos en este libro ofrecen por lo tanto una visión muy diversificada de esta problemática, al resaltar la dualidad de ambos sentimientos, el gozo y el dolor, e incluso su ambivalencia y, desde luego, su complementaridad dentro de una sobredeterminación de los sentidos y de los usos del cuerpo. Determinados sucesos tienden en efecto a crear respuestas bajo forma de actitudes y sentimientos. De ahí la organización de la obra, que se corresponde precisamente con « cambios de actitud relacionados con sentimientos de fervor espiritual compatibles con el ansia de felicidad ». La primera parte recoge por lo tanto el fundamento religioso de las emociones (« Sufrir por Dios y gozar en Cristo ») : pecadores de la comarca zacatecana en el sigo XVI, un mercader castellano reo del tribunal de la Inquisición, viajeros encomendando su alma a Dios al cruzar el océano, y monjas penitentes del barroco novohispano, nutren los análisis de Salvador Treviño, Estella Roselló Soberón, Flor Trejo Rivera y Rosalva Loreto López.

Dedicada a las últimas décadas de la vida colonial, la segunda parte se centra en el « mundo terrenal », destacando situaciones de violencia o de coacción vivida a diario, de apremiantes necesidades o aspiraciones en lo material. Milagros e imágenes se les enfrentan a las enfermedades (es el sufrimiento meritorio), banquetes y festines contrarrestan hambrunas (el comer como acto cultural), adulterios y escarnios públicos (el cornudo novohispano) rescatan la figura del honor mientras la violencia plebeya y el miedo se entrelazan también a diario con la reivindicación del honor, dejando huellas muy concretas en los cuerpos de los contrincantes (estudios de Gabriela Sánchez Reyes, Matilde Souto Mantecón, Teresa Lozano Armendares, Sonya Lipsett-Rivera). Con el siglo XVIII se abre la posibilidad de reivindicar el deseo de ser feliz, de evadir sufrimientos y gozar de placeres materiales, como lo evidencian la vivencia del carnaval o el éxito de la ópera en la ciudad de México, la vida azarosa de Santa Anna o el imaginario de los reos en las cárceles de la ciudad de México (Verónica Zárate Toscano, Leticia Mayer, Will Fowler, Elisa Speckman Guerra).

Pese a la diversidad temática y espacial de los estudios reunidos en este volumen, la obra logra sortear unos cuantos escollos propios del género de la historia cultural y de sus derivaciones, en especial la constante mediación de las fuentes (escribanos, confesores y otros « mediadores culturales »), y su contrapartida: la imprescindible mirada crítica que le exige en última instancia al estudioso de un pasado sensible pero remoto. Asimismo pone de relieve otra « virtud » de este tipo de aproximación : el equilibrio logrado por los autores entre el placer del relato y el deber de la interpretación. Este no es el menor logro de esta novedosa aproximación a varios aspectos de la vida cotidiana en México.

 


[*] Reseña originariamente publicada en la revista Nuevo Mundo / Mundos Nuevos.

 

ISSN 0327-7763  |  2010 Araucaria. Revista Iberoamericana de Filosofía, Política y Humanidades  |  Contactar