Homenaje a la mujer madura en Ciencia
«Día de la mujer y la niña en la Ciencia»
Por estas fechas, se celebra desde hace casi 10 años, el «Día de la mujer y la niña en la Ciencia». Se trata, en primer lugar, de sacar del ostracismo la figura de tantas mujeres que a lo largo de la historia han hecho Ciencia tanto en los laboratorios, como en instituciones educativas o sociales. Por otro lado, se pretende dar a conocer la actividad que las investigadoras actuales llevan a cabo enseñando y haciendo Ciencia. Con especial interés se trata de contrarrestar la sensación bastante extendida, de que ser mujer y ser científica son condiciones incompatibles, y abrir la mente de las niñas a la posibilidad de prepararse y seguir una carrera relacionada con las «STEM», acrónimo de los términos en inglés «Science, Technology, Engineering, and Mathematics».
Se trata, pues, de invitar al público en general y a las niñas en particular, a conocer el pasado, presente y futuro de la mujer en Ciencia, y a reflexionar acerca de cómo conseguir que la igualdad en este campo se haga efectiva. Para conseguir este objetivo, creo que esta labor debería complementarse con dos acciones:
– tratar de que los hombres se incorporen en un número significativo y de forma activa y comprometida a la consecución de estos objetivos,
– extender el mensaje a mujeres maduras (hablo de las que rondan los 60 y de ahí para arriba), cuyas circunstancias vitales y generacionales, las alejaron de la ciencia, y cuyo entorno las convenció de que «la ciencia es muy difícil y, desde luego, no es para ti».
Cuento con muchas de ellas en los cursos con contenido científico que imparto en el Aula de la Experiencia de la US, un bellísimo proyecto de mi Universidad en el que personas que cumplen el único requisito de ser mayor de 50 años, se incorporan a nuestras aulas para aprender y profundizar en todo tipo de materias. Estas mujeres, que constituyen unos dos tercios del alumnado, no se conforman y quieren saber, y nosotros, los profesores del Aula, las acompañamos en este aprendizaje; nuestra recompensa son sus muestras de agradecimiento y la constatación de que con mucha frecuencia, se constituyen en unas portavoces eficacísimas para transmitir a su entorno el mensaje de que la «Ciencia es Cultura».
La ciencia está a tu alcance, en la punta de tus dedos.
¡Estíralos y la alcanzarás!
Autora del texto: Isabel López Calderón
Gracias Isabel por tus palabras y por ser la mejor abanderada posible para el «Día de la Mujer y la Niña en la Ciencia». Tu impecable trayectoria como docente, investigadora, gestora y divulgadora es un ejemplo a seguir para niñas y mujeres, jóvenes y maduras, como indicas en el texto.
Isabel, aliento a ciudadanas y ciudadanos a difundir tu mensaje. Actualmente no cabe otra visión del mundo del trabajo. Por mi parte puedo además indicar que la experiencia profesional con las compañeras que he tenido en mi trabajo técnico –ingeniería-, ha sido muy provechosa.