Proyecto BINASEX

Los estados modernos se asientan sobre un sistema sexo-género que construye la naturaleza humana y la ciudadanía como masculina y femenina, en términos binarios y dicotómicos. Es, para empezar, un sistema jerárquico, en el que los rasgos masculinos se elevan y se imponen sobre los femeninos, convirtiéndose en la base de la discriminación estructural de las mujeres y su subordinación a los varones. Y este sistema es también el responsable de la construcción de rígidas identidades de género construidas como mutuamente excluyentes, que se imponen por encima de toda consideración al principio de autodeterminación o auto-normatividad, del principio de autonomía (relacional) que rige nuestros sistemas democráticos.

Este rígido sistema sexo-género impregna todas nuestras vidas, pero afecta principalmente a las mujeres y a las personas que no encajan en sus dicotomías, y que lo someten cada vez más a cuestionamiento crítico. Mientras las mujeres se enfrentan al reto de cuestionar su subordinación deconstruyendo la pretendida supremacía de lo masculino, las personas trans y no binarias se cuestionan la construcción dicotómica masculino/femenino que sustenta los estados modernos.

El proyecto BINASEX tiene por objeto explorar estos retos y afrontarlos en su complejidad interdisciplinar desde una perspectiva internacional y comparada. Su objetivo es explorar las exigencias de de/reconstrucción del género en términos que permitan acoger identidades diversas más allá de los tradicionales criterios binarios. Es arrojar luz crítica sobre las respuestas que se están articulando a estas exigencias y proponer otras más adecuadas donde parezca necesario. El equipo es tanto internacional (sus miembros trabajan en España, Alemania, Italia, Países Bajos, Reino Unido y Ecuador) como interdisciplinar, cubriendo las áreas de derecho constitucional, filosofía del derecho, derecho europeo, derechos humanos, antropología, filosofía, teoría y ciencia política y estudios culturales y de género.

La de/reconstrucción del género en términos no binarios es especialmente importante en un contexto supranacional como la Unión Europea, donde algunos estados han avanzado más que otros en este sentido y donde el derecho de la ciudadanía a la libre circulación no puede venir a costa del reconocimiento de su estatus personal (ECJ, 5 June 2018 -C-673/16 Relu Adrian Coman & Others/Inspectoratul General pentru Imigrari & others). El binarismo afecta pues a la ciudadanía democrática a nivel tanto estatal como supraestatal. Ello pone de manifiesto la urgente necesidad de integrar la diversidad de sexo-género en nuestros sistemas democráticos. El propósito de este proyecto es explorar vías para alcanzar este objetivo.

¿QUIÉNES SOMOS?