Endesa y la Junta de Andalucía presentan un proyecto pionero en ahorro energético
El presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, y el presidente de Endesa, Borja Prado, han presentado en Málaga la iniciativa SmartCity, un proyecto pionero en nuestro país que plantea un nuevo modelo de gestión energética en las ciudades, para conseguir un aumento de la eficiencia energética, una reducción de las emisiones de CO2 y un aumento del consumo de energías renovables. El proyecto, que contempla actuaciones por una inversión de 31 millones de euros, trata de dar una respuesta integral a los desafíos medioambientales involucrando al consumidor. Entre las novedades, destaca la nueva generación de contadores inteligentes que promueven un consumo más sostenible.
SmartCity, proyecto impulsado por un grupo de once empresas y liderado por Endesa, se desarrollará en Málaga, concretamente en la zona de la Playa de la Misericordia y se beneficiarán 300 clientes industriales, 900 de servicios y 11.000 clientes domésticos durante cuatro años.
Las fuentes de energía renovable se integrarán de forma óptima en la red, acercando la generación al consumo a través de la instalación de paneles fotovoltaicos en edificios públicos, el uso de microgeneración eléctrica en algunos hoteles o instalación de sistemas microeólicos en la zona. Existirán sistemas de almacenamiento energético en baterías, de manera que parte de la energía podrá ser consumida después en la climatización de edificios, el alumbrado público y el transporte eléctrico. Se potenciará también el uso de coches eléctricos, con la instalación de postes de recarga y el envío de una pequeña flota de vehículos. Pero, sobre todo, se busca hacer partícipe en todo el proceso al usuario final.
Todos los clientes que participarán en el proyecto contarán con los nuevos contadores inteligentes para facilitar un consumo más sostenible. Además, la instalación de sistemas inteligentes y de sistemas avanzados de telecomunicaciones y telecontrol permitirá actuar en tiempo real y de forma automática sobre la red de distribución, haciendo posible una nueva gestión de la energía y potenciando la calidad del servicio. Después, se recogerán los datos de consumo y de eficiencia para extraer conclusiones y exportar la experiencia a nuevas zonas urbanas, de manera que se pueda ir cambiando el modelo energético actual hacia un modelo más sostenible. El objetivo es conseguir un ahorro energético del 20%, así como la reducción de emisiones en más de 6.000 toneladas de CO2 al año en la zona del proyecto.
SmartCity cuenta con un presupuesto de 31 millones de euros financiados en parte por Fondos Feder gracias al apoyo de la Junta de Andalucía y el Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial del Ministerio de Ciencia e Innovación. Se ha elegido esta ciudad porque reúne todos los requisitos tecnológicos necesarios para garantizar el éxito del proyecto: gran potencial de crecimiento, amplias capacidades tecnológicas, presencia de Universidad y empresas, fuerte apoyo de las administraciones y excelentes infraestructuras eléctricas. Endesa ha liderado un equipo formado por las empresas más destacadas del sector, que colaboran y respaldan este ambicioso plan: Enel, Acciona, IBM, Sadiel, Ormazábal, Neo Metrics, Isotrol, Telvent, Ingeteam y Greenpower. También se ha contado con la colaboración de varias universidades, entre ellas la Universidad de Sevilla, y centros de investigación nacionales y autonómicos.
SmartCity se convertirá en un referente mundial en el desarrollo de tecnologías energéticas de vanguardia, al igual que otras iniciativas ya operativas en Estocolmo, Dubai, Malta, Ohio y Colorado. El proyecto se enmarca dentro del PLAN 20-20-20, diseñado por la Unión Europea, que establece objetivos para el año 2020 de aumento de la eficiencia energética en un 20%, reducción de las emisiones de CO2 en un 20% y aumento de las fuentes de energía renovables hasta un 20% en el “mix” energético.
Muy interesante proyecto. ¿Está ya realmente en marcha?
Por supuesto, de hecho, hace ya tiempo que se está planificando, porque no es fácil poner de acuerdo a 11 empresas (la mayoría de ámbito internacional), varias universidades, etc. Es un proyecto ‘titánico’ no sólo por el coste sino por los beneficios que puede proporcionar (a corto y largo plazo). Las crecientes exigencias actuales energéticas y medio ambientales hacen necesario cambiar el esquema de explotación y distribución de la energía, hacia un modelo mucho más eficiente, de esta forma se reduce el desperdicio de energía y, por lo tanto, el impacto medio ambiental. Tal y como se dice en el post, creo que será un proyecto con un alto impacto sobre las tecnologías actuales de aprovechamiento de la energía.
31 millones de euros podrían suponer mil instalaciones fotovoltaicas. Con un mínimo, minimísimo de 1 Kw de potencia, supondría que se podría crear una estupenda central de 31 Mw. Si con este dinero se subvencionara la mitad de la instalación, conseguiríamos 62 Mw de energia fotovoltáica límpia que inyectada en la red nos permitiría un ahorro en polución y gasto de otros combustibles. No digamos nada si este dínero se invierte en eliminar simplemente los gastos de financiación de nuevas instalaciones, se podría duplicar la potencia producida en Andalucía en un solo año. Según https://www.construible.es/noticiasDetalle.aspx?id=4859&c=1&idm=5&pat=5 , en Andalucía existen 664,61 MW fotovoltaicos equivalente al consumo de unas 788.200 personas. ¿Se podría conseguir lo equivalente al consumo de 1.500.000 personas?
Esto pensando en energía fotovoltaica, si lo aplicamos a la eólica o una combinación de ambas, la produccion sería mayor.
Creo que el camino que hay que tomar ahora es este, subvencionar a quien invierte, favoreciendo a los pequeños productores para crear una cultura mayor de la inversión en futuro y por favorecer esto la creación de empleo especializado, la competencia y el compromiso social con otras medidas que han de tomarse a título individual, como personas, tendentes a reducir la contaminación.
Esto si nos llevaría a que en el futuro hubiese demanda de vehiculos electricos, pues el puesto de recarga lo tendremos en nuestra propia casa. Quizá se podría entonces optimizar la recarga con una plinificación horaria que aproveche los momentos de menor demanda de la red.
Mucho me temo que estos proyectos solo sirvan de alimento para los médios de comunicación, los políticos y como mucho para los departamentos de investigación de grandes corporaciones. Conste que esta investigación me parece imprescindible pero esta manera de gasto de dinero público me parece un disfraz. Ha de ser la demanda la que justifique que las empresas dediquen recursos a la investigación.
Saludos.
Muy bueno y completo el comentario de Pablo. Yo, en lo esencial, estoy de acuerdo con lo que comentas. Simplemente unas cuantas reflexiones:
– Son imprescindibles los proyectos de I+d e Innovación. Aunque no obtengan resultados rentables a corto, hay que hacerlos. Son el alimento del futuro.
– Energía fotovoltáica? Energía Eólica? Es la apuesta adecuada? Desde el punto de vista Medio Ambiental parece que son mejores que las Térmicas. Pero, qué pasa con las Nucleares? Es energía limpia y mucho más rentables.
– No está claro que la mini producción sea una buena idea. Ahí están las Mini Centrales HIdroeléctricas. Sí, funcionan, ademñas de forma autónoma. Pero parece que no son muy rentables.