Capítulo 11. Un siglo de los Hospitales de la Iglesia Católica España: De la refundación de nuevas instituciones al descenso del número de hospitales

Autores: Pilar Leon-Sanz (Universidad de Navarra)

Tras una tradición milenaria, en el último tercio del siglo 19 se volvieron a fundar hospitales de la Iglesia Católica, ya que habían desaparecido como consecuencia de los procesos de desamortización de los bienes de la Iglesia. Los nuevos hospitales incorporaron las innovaciones científicas y la especialización médica del momento. A lo largo del primer tercio del siglo 20, la Iglesia mantuvo un buen número de hospitales (quirúrgicos, maternidades, infantiles, psiquiátricos, asilos, etc.), fundamentalmente en áreas urbanas. Esta labor asistencial prosiguió en el inicio de 1940s, cuando la Iglesia recuperó la propiedad de los hospitales que, primero durante la II República (1931-1939) y luego durante la Guerra Civil (1936-1939), habían sido destinados a otras finalidades.
El análisis del tipo y número de instituciones y de camas de los hospitales de la Iglesia muestra que entre los años 40 y los años 80 del siglo XX, estos hospitales supusieron entre el 15-17% del total de las camas del sistema sanitario español. El tipo más frecuente fue un hospital quirúrgico de menos de 100 camas situado en áreas urbanas. Destaca la aportación de los hospitales de la Iglesia a la asistencia psiquiátrica (el 30 % del total de estas camas en España). A mediados de los años 1980 se produjo una reducción del número de camas y de los hospitales dependientes patrimonialmente de la Iglesia.

Elena García Cruz ha participado en el curso «Research Design Course – ESTER European graduate School for Training in Economic and social historical Research» con la ponencia titulada:

Mental health coverage in the Spanish hospital system in historicalperspective

Desde la segunda mitad del siglo XIX y hasta el inicio de la II República española en 1931, la regulación de la asistencia a los alienados se incluía de forma general en la Ley de Beneficencia de 1849. Dicha ley preveía una doble red de asistencia psiquiátrica: una pública y otra privada. Los manicomios públicos estaban poco medicalizados, debido a la falta de inversión estatal, la ausencia de dirección médica y la falta de preparación psiquiátrica de los médicos que trabajaban en ellos, lo que los convertía en espacios de reclusión. En cuanto a los privados, se dirigían al público más acomodado. La aprobación del Decreto de 3 de julio de 1931 supuso un avance en la psiquiatría, sin embargo, su trascendencia se vio paliada por el estallido de la guerra civil. En este contexto, surgen iniciativas privadas en todo el estado español para hacer frente a la carencia de servicios públicos adecuados. El objetivo de este trabajo es analizar el origen de dichas iniciativas, su financiación y recopilar el número de establecimientos que había en el periodo de estudio. Se estudiará cómo evolucionaron los manicomios que se fundaron a finales del siglo XIX y si siguen en funcionamiento hasta nuestros días. Además, se analizará quien mantiene la propiedad y si la legislación estatal mejoró durante el periodo de estudio. Se tomará como ejemplo algunos grandes hospitales psiquiátricos privados que se construyeron en esta época y continúan operativos en la actualidad como, por ejemplo: el Sanatorio Esquerdo (Madrid) y el Institut Pere Mata (Reus, Tarragona). Para ello se buscará información en fuentes primarias como archivos privados de los hospitales o la documentación que depositaron los psiquiátricos privados en el registro mercantil de su ciudad.

Capítulo 10. Los hospitales de los emigrantes españoles en América Latina

Autores: Alicia Gil Lázaro (Universidad de Sevilla) y Alejandro Fernández (Universidad Nacional de Luján, Argentina).

En el tiempo de la gran oleada migratoria, entre el último tercio del siglo XIX y la primera mitad del XX, los emigrantes españoles fundaron alrededor de medio centenar de hospitales se expandieron por toda la geografía americana receptora de inmigración hasta las décadas previas a la II Guerra Mundial. Esto fue posible gracias a una amplia y muy diversa capacidad asociativa y su preocupación por el cuidado de la salud de los inmigrantes afiliados. Los dos primeros hospitales, en Ciudad de México y Buenos Aires fueron creados por Sociedades de Beneficencia Española, en la década de 1870. La mayoría de las asociaciones financiaban la atención hospitalaria a través del cobro de una cuota mensual a sus miembros, un funcionamiento similar al de las compañías de seguros que conllevaba que solo las más grandes y saneadas pudieran sostener de forma estable sus instalaciones. Una práctica fue común a muchas de ellas, fue invertir su excedente en la compra de propiedades urbanas para luego alquilarlas, o bien en valores mobiliarios como acciones o títulos de la deuda pública. Con ello trataron de conservar y acrecentar el patrimonio sin que esto dependiera del arribo y afiliación de nuevos inmigrantes. entre los años veinte y cuarenta, algunos de estos hospitales lograron llevar a cabo importantes procesos de modernización en sus instalaciones y especialidades médicas, en su cobertura sanitaria y en la gestión de su patrimonio y comenzaron a participar en los sistemas universitarios de los países de implantación. Tras la llegada de los sistemas de salud públicos algunos cerraron sus puertas, otros fueron adsorbidos por el Estado y otros transformaron su naturaleza migratoria convirtiéndose en hospitales privados para clientelas de altos ingresos hasta la actualidad.

Hospital Español de Buenos Aires. Hallada en Martínez Nespral, F., et al. (2006). «Ecos del modernismo catalán en el Río de la Plata». Documento de Trabajo, nº 151, Universidad de Belgrano, p. 20.

Capítulo 9. La financiarización del sistema hospitalario privado en España: una breve reflexión

Autores: Jerònia Pons-Pons (Universidad de Sevilla) y Margarita Vilar-Rodríguez (Universidad de A Coruña)

Desde finales del siglo XIX, pero sobre todo en las primeras décadas del siglo XX, médicos y especialistas fundaron en la mayor parte de las ciudades europeas, entre ellas algunas españolas, pequeños hospitales o clínicas independientes, donde incorporaron las nuevas técnicas de la época (RX, laboratorios, quirófanos, etc) para atender la creciente demanda sanitaria de las clases altas, profesionales liberales, burguesía comercial y una pequeña clase media emergente. Tras la II Guerra Mundial en Europa –y la guerra civil en España-, estos hospitales privados independientes continuaron vinculados a profesionales médicos y a incipientes compañías de seguro de salud, mientras se configuraba un sistema hospitalario público. Este esquema experimentó un cambio profundo en la década de 1980, en un marco de inestabilidad económica, cuestionamiento de los estados de bienestar y triunfo de los paradigmas neoliberales. A partir de aquí, la banca, las aseguradoras generales y los fondos de inversión se interesaron por los hospitales privados, adquiriéndolos, transformándolos y separando con claridad la propiedad de la labor de los profesionales médicos. Dentro de este último proceso se han creado los grandes grupos hospitalarios que obedecen a los intereses del capital financiero y están muy ligados en algunos países a la sanidad pública a través de la firma de acuerdos de colaboración. Con este marco de fondo, este podcast persigue reflexionar sobre un concepto clave la “financiarización” del sector hospitalario privado, su siginificado, sus causas y sus consecuencias.