Varias decenas de personas han acudido este jueves a la convocatoria de la Junta de Personal Docente e Investigador (PDI) funcionario de la Universidad de Sevilla (US) para concentrarse frente a las puertas del Rectorado en protesta por el caso de Encarnación Santamaría, profesora de la Facultad de Medicina, de la que se pide el reintegro «sin más demora» en la institución.
El secretario de la Junta de Personal, Ángel Francisco Villarejo-Ramos, ha expuesto a Europa Press que en la movilización han intervenido representantes de los cuatro sindicatos presentes en el organismo. En la misma han estado presentes tanto miembros de la Junta de Personal y del Comité de Empresa de Personal Laboral como profesores y personal de administración a título particular y la propia afectada.
«Parece mentira que aún nadie haya querido reconocer el error», ha lamentado Villarejo-Ramos, dando cuenta de las reuniones mantenidas por el particular, a pesar de lo cual no se ha encontrado solución a una tesitura que ya cuenta con sentencias judiciales en las que se insta a la Hispalense a «resolver los asuntos por la vía de nulidad».
«A esta docente no se tardó en expulsarla de la institución y de su condición de funcionaria por una resolución rectoral firmada de forma precipitada, 72 horas después de que la profesora pidiese un cambio de plaza, y sin razón fundada alguna, como así se ha demostrado en la información jurídica que la afectada, con el apoyo de la Junta de Personal, ha presentado al actual rector», exponían la pasada semana el Comité de Empresa Laboral y la Junta de Personal Funcionario de la US.
Con carácter previo a la concentración de apoyo a Santamaría -que se encuentra «psicológicamente mal» por estos hechos-, que ha contado con una ‘performance’ de Inmaculada Rodríguez, de la Facultad de Bellas Artes, que también ha denunciado «acoso» en su departamento, ha tenido lugar por varias horas una asamblea de profesores de Educación, facultad en la que se dieron los casos de abuso del catedrático Santiago Romero, condenado a siete años de cárcel por una sentencia que ha sido clave en la catarsis a la hora de resucitar estas denuncias.
En dicha asamblea se ha aprobado un manifiesto en el que se viene a pedir «responsabilidad» al equipo de gobierno de la facultad y se reclama el nombramiento de una gestora para comandar el proceso electoral de una nueva Junta de Facultad.
Santamaría fue expulsada de la universidad y de su plaza de funcionaria «de forma totalmente irregular, hace ahora más de nueve años, cuando se encontraba afectada por una crisis de ansiedad y estrés, resultado del ambiente en su puesto de trabajo».
FUENTE: ABC de Sevilla
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