El pasado 14 de diciembre un grupo de asociados realizamos la visita al monasterio de Santa Paula, de monjas jerónimas, es uno de los más representativos y de los más accesibles. En el corazón del barrio de San Julián, cerca de San Marcos y al convento de Santa Isabel fue declarado patrimonio histórico artístico en junio 1931.
Fundado por Doña Ana de Santillán en 1473, la iglesia se construyó entre 1483 y 1489. En ella trabajaron artistas tan renombrados como Pedro Millán, Nicoloso Pissano, Andrés de Ocampos, Felipe de Rivas o Martínez Montañés. El convento dispone de un museo donde se exponen obras de arte, antes relegadas a la clausura.
Actualmente, la Comunidad está formada por 20 monjas de cuatro continentes, siendo famosos los dulces y mermeladas que elabora el convento. Cada producto de Santa Paula tiene una receta especial que ha ido perfeccionándose a lo largo del tiempo.
Posee una excepcional Colección Artística Permanente, que visitaremos durante el recorrido, obras pictóricas, escultóricas y la excepcional iglesia del mismo.