En el sistema social de la India, muy diferente al nuestro, ser conductor de rickshaw es todo un privilegio, ya que supone tener un medio de vida que va a permitir a este hombre vivir con dignidad y mantener a su familia. Visto desde el punto de vista occidental de muchos turistas que visitan el país, esta práctica está vista como una forma de esclavitud, pero la realidad es que esta idea, aunque cargada de buenas intenciones, está teniendo un efecto contraproducente, ya que los rickshaws están perdiendo su modo de vida y terminan en una pobreza que antes no tenían.

Cuando te hemos propuesto que hicieras el ejercicio de inventar una historia, tú no contabas con esta información, pero, sin embargo, te has aventurado a hacer conjeturas sobre lo que necesita este hombre: unos zapatos, ropa, un trabajo digno, alguien que le escuche, ayuda para cargar su carro… Son las típicas respuestas que podremos encontrar y que realmente no responden a esa necesidad real que detectamos. El problema reside en que desconocemos todo el trasfondo social que hay en la imagen y que juzgamos desde nuestra perspectiva y desde nuestra experiencia. En otras palabras, pienso en lo que yo necesitaría en su lugar, no en lo que él realmente necesita. Igual que con el ejercicio anterior, he visualizado mi bañera, mi realidad, y desde ahí he partido para dar solución a un problema que tiene otro sin realmente saber nada de él.

Esto que ha pasado al realizar este ejercicio nos ocurre muchas veces en el ámbito de la cooperación cuando trasladamos nuestras propias ideas o prejuicios a la realidad que observamos, o lo que es lo mismo, miramos el mundo desde nuestro pequeño círculo, dando por hecho que lo que es malo para mi es malo para todos y, en muchas ocasiones, no va a ser así. En ese sentido, es de vital importancia informarnos sobre el contexto cultural en el que vamos a movernos, su historia, sus costumbres, sus ideas… Una buena manera es hacer un pequeño trabajo de investigación previo sobre la historia del país y su cultura, también leer algo de literatura del destino al que vamos a ir, elementos que conforman lo que Lotman llama la semiosfera; pero, sobre todo, la clave es tener una actitud de escucha activa hacia las personas que han estado allí o, si tienes oportunidad, hacia los propios nativos.