PUERTA DEL ARENAL
Cronología: s. XII/1864
Periodo Histórico: Edad Media
Estilo: Almorávide (s. XII) – Manierismo/Barroco (XVI-XVII-XVIII)
Conectaba: Las Gradas de la catedral con el Arenal y Puerto de Sevilla.
Uso Actual: Vía pública
La Puerta del Arenal es una de los pasos originales con los que contó la muralla sevillana desde su construcción en la etapa almorávide, en el siglo XII. Posteriormente, durante el periodo almohade, a principios del siglo XIII, se ejecutarían el foso y la barbacana o antemuro que la protegían por el exterior.
Con el nombre de Puerta del Arenal no aparece citada hasta el siglo XIII, ya en época cristiana. Su nombre hace alusión a la condición arenosa de la amplia explanada que se extendía entre la muralla y el río.
En la ciudad actual, esta puerta se ubicaría en el espacio de encuentro entre las calles García de Vinuesa y Arfe. Todavía el topónimo de este lugar, Puerta del Arenal, recuerda su presencia. Hacia el exterior disfrutaba de una posición de centralidad en el área portuaria del Guadalquivir, entre la Torre del Oro y el Puente de barcas; siendo por ello mismo la principal conexión entre el puerto de Sevilla y el centro económico, social y religioso de la ciudad, el entorno de la Catedral.
Como buena parte de las primeras puertas, inicialmente estaría conformada como una torre-puerta, con un vano de acceso pequeño y el paso en un único recodo. A lo largo de los siglos XIV y XV esta primera obra recibiría numerosas obras de mantenimiento y reparación, construyéndose una nueva torre en 1386. La disposición en recodo y la barbacana se mantendría hasta mediados del siglo XVI, cuando la puerta original sería demolida. El inicio del comercio americano había incrementado de forma relevante el tráfico del puerto y la intensidad del paso por la Puerta del Arenal, lo que, además de obligar a mantenerla permanentemente abierta, haría necesaria su reforma.
La vieja puerta se derribaría en 1566. Su nueva construcción se encargaría al arquitecto Hernán Ruiz II, el autor del campanario de la Giralda, que la reedificaría en fábrica de piedra. Su excelente factura incitó al Asistente de la ciudad a considerarla uno de los mejores que se habían hecho en Castilla. Aunque sufriría varias reformas a lo largo de los siglos, al menos dos importantes en el XVIII, en 1734 y 1757, la imagen otorgada por Hernán Ruiz sería posiblemente la que esencialmente mantendría hasta su demolición en 1864. Así parecen demostrarlo las vistas de los siglos XVI y XVII, el óleo de Pérez Villaamil y la foto de mediados del siglo XIX, pocos años antes de su demolición.
La Puerta quedaría constituida por un gran arco de medio punto entre pilastras, un poderoso entablamento y un frontón semicircular. La composición se cierra con tres remates verticales y dos figuras reclinadas sobre el frontón, posiblemente desde el siglo XVI, que simbolizan la abundancia, en clara relación a las riquezas provenientes del vecino Puerto de Indias. La imagen impresa por Tovar en 1878, con el frontón triangular, es quizás una reinterpretación hecha cuando ya estaba demolida o el fruto de una remodelación ejecutada muy pocos años antes de su desaparición.
Puerta del Arenal (Sevilla), Genaro Pérez Villaamil, 42 vistas monumentales de ciudades españolas, Museo del Prado (1835-1839).
Visto en MuseodelPrado.es