PUERTA DE LA CARNE

Cronología: S. XII/1864

Periodo Histórico: Edad Media

Estilo: Almorávide (s. XII) – Renacentista/Manierista (1576-1579) – Derribo (1864)

Conectaba: El barrio de La Judería con el Matadero, el Rastro, la Fundición y el Cuartel de Caballería, saliendo de la ciudad entre el arrabal de San Bernardo y zonas de uso agrícola

Uso Actual: Cruce de viario + Equipamientos públicos (derribada en 1864)

La Puerta de la Carne, uno de los principales puntos de entrada y salida hacia el este del actual centro histórico Sevilla, es creada con objeto de la ampliación almorávide de la muralla de la ciudad, lo que supuso en su momento un considerable aumento de su tejido urbano.

Este fragmento de la ciudad intramuros mantuvo, a lo largo de los siglos, un carácter productivo e informal, alejado de los centros monumentales o de representación de las grandes viviendas palaciegas que se encontraban cercanos a otras puertas vecinas, como es el caso de la Puerta de Carmona o, más al sur, la Puerta Nueva y la Puerta de Jerez, que daban paso a la ciudad institucional.

En el entorno de la Puerta de la Carne, sin embargo, se encontraba el zoco medieval, posteriormente mercado, en la actual calle de Santa María la Blanca, así como un buen número de pequeños establecimientos de manufactura preindustrial, áreas vacías intramuros y zonas de enterramientos. La puerta original del siglo XII, llamada de Bab-Chahwar, era una simple estructura con entrada en recodo, siguiendo una lógica defensiva sin más intenciones de representación.

La gran modificación de la misma se realizará más tarde, en el siglo XVI, tras la instalación extramuros, a poca distancia de la puerta, del Matadero erigido por los Reyes Católicos en 1489, cuya producción de carne para abastecimiento de la ciudad le dará el nombre con el que la conocemos hasta hoy. La reforma será encargada a Asensio de Maeda, quien entre 1576 y 1579 efectuará reformas para aportarle un estilo renacentista con un cierto carácter manierista.

Mientras tanto, la ciudad intramuros paulatinamente se colmata y comienza a expulsar los usos fabriles hacia zonas más periféricas. Así, el área entre la Puerta de la Carne y el Arroyo Tagarete albergará, progresivamente una cierta relevancia derivada de la incorporación a la misma de una serie de grandes equipamientos urbanos como la Real Fundición de Artillería (1565, al otro lado del Tagarete), el Cuartel de Caballería (1788) o el Rastro. Esto conllevará, a su vez, el nacimiento del arrabal de San Bernardo -uno de los primeros, junto a Triana, en formalizarse en la Sevilla extramuros.

A lo largo del siglo XIX, la creación de viviendas burguesas va a ir acompañada de operaciones de renovación e higienización urbana que llevarán a la alineación del tramo de trazado urbano y muralla que vinculaba la Puerta de la Carne con la de San Fernando (1855), con la posterior urbanización y el embellecimiento de la Ronda Urbana que se convertirá en el Paseo del Retiro, actualmente Paseo de Catalina de Ribera, mediante la adquisición de parte de los terrenos de la histórica Huerta del Retiro, ámbito de carácter agrícola anexo al Real Alcázar y sus jardines monumentales (Huerta de la Alcoba).

Finalmente, la Puerta de la Carne será demolida en 1864, para dar lugar al posterior ensanche de la calle Santa María la Blanca y consecuente descontextualización del emplazamiento original de la Puerta.

Fachada exterior de la Puerta de la Carne. Tovar, B., hacia 1878. Laboratorio de Arte de la Universidad de Sevilla a través del Estudio Arqueológico del Plan Especial de Protección del Sector 05 “San Bartolomé”