Desde la Delegación de alumnos queremos aprovechar este espacio para transmitiros nuestra mayor ilusión, de la cual espero profundamente que podamos haceros partícipes para trabajar conjuntamente representando fielmente la voz de los estudiantes de la Facultad de Derecho.

Las Delegaciones de alumnos son entes de representación estudiantil y, por tanto, requieren de todas y todos los universitarios para poder realizar su trabajo. Se trata de un trabajo de representación y, sobre todo, de participación y colaboración solidaria.

No podemos entender una Delegación que no logre acercarse a su colectivo, que no esté mano a mano con el mismo. Para ello os queremos animar a que en cualquier momento reclaméis de nosotros, vuestros representantes: delegados y subdelegados de clase, miembros de la Delegación de Alumnos, claustrales, etc. Nosotros no podemos ser más que la punta de lanza que alce vuestras voces, pero vosotros debéis ser el mástil que nos impulse.

Son muchas las cosas que tenemos por hacer. De ordinario trabajamos a destajo por mejorar esas cuestiones de “cultura” académica, que afectan tan directamente a la ordenación de nuestros estudios y que tanto nos preocupa: desde la fijación de los exámenes, al prácticum y la Ley de procura y abogacía; pasando por el seguimiento de los nuevos planes de estudios y la protección de los derechos para quienes se encuentran en planes en extinción. Asimismo, queremos acercar la Delegación de Alumnos a través de mecanismos como el de esta página web y otras fórmulas de comunicación directa e inmediata. Nos preocupa también la situación de las infraestructuras en las que desarrollamos nuestras actividades y queremos impulsar el desarrollo de actividades culturales en el seno de nuestra Universidad.

Trataremos de ir sembrando la semilla del trabajo y la representación, corrigiendo aquello que pueda perjudicar a nuestros derechos y ayudando al desarrollo de nuestra Universidad y, en general, quedamos abiertos a cualquier propuesta o idea y sobre todo esperamos de vuestra participación. No podemos construir una Delegación sin vosotros así que, unámonos para conseguir una Delegación más abierta y plural.

Parafraseando al gran cónsul romano Cicerón, sabed que contáis con una Delegación que sin vacilar cumplirá con vuestras órdenes y que puede, mientras le quede vida, defender y responder personalmente de vuestras resoluciones.

“Fiat iustitia ne pereas mundus”

(Cultiva la justicia para que no perezca el mundo)